Nuestro sustrato es un medio de cultivo, de creación propia, realizado a partir de la fermentación y transformación a cargo de nuestra colonia de MM, de subproductos de otras industrias, como la cascarilla de arroz, carbonilla, tierra negra, compost (de producción propia), además de bokashi y polvos de roca.
Puede ser usado directamente como sustrato, aunque también como abono y como mejorador de sustratos livianos con bajo contenido de materia orgánica, por lo que se puede utilizar como complemento a la hora de idear nuestro sustrato final gracias a su alto contenido de materia orgánica, pudiendo ser implementado en todo tipo de cultivo.
Fue creado con el objetivo de aprovechar desperdicios de otras industrias y así evitar la sobre explotación de recursos naturales y no renovables como la turba.
SUSTRATO MÁGICO
- Combina los beneficios de la materia orgánica en descomposición y la materia orgánica estabilizada (Carbón, humus, etc.) imitando las condiciones de la superficie del suelo de los bosques.
- Su equilibrada porosidad promueve una buena distribución de raíces, una excelente aireación y alta absorción de humedad.
- Beneficia la actividad de los microorganismos y evita el lavado de nutrientes, los cuales quedan retenidos y son liberados gradualmente.
- Actúa como regulador de la temperatura del suelo amortiguando los cambios entre el día y la noche y entre estaciones.
- Su capacidad de intercambio catiónico es adecuada para garantizar una buena fertilidad para todos los cultivos, su nivel de salinidad es bajo y posee una elevada capacidad para amortiguar cambios bruscos de pH.
- A la vez la carga microbiana benéfica inoculada en su estabilización, transformará cualquier abono orgánico que toque el sustrato en nutrientes disponibles para la planta, entregándoselos gradual y constantemente.